El entorno era idílico al lado del río y la habitación era amplia y cómoda. La cama tenía un colchón buenísimo que garantizaba un descanso perfecto. Además, la pareja que lleva el lugar era muy agradable y nos ofrecieron una degustación de sus vinos, que eran deliciosos. pudimos disfrutar de una cena fría en el jardín, lo cual fue una experiencia encantadora. El desayuno, aunque faltaba algo salado, estaba bastante bueno, con fruta, mermelada y bollería dulce.

Al estar a la orilla del río, es posible que haya muchos mosquitos en ciertas épocas del año. nos encontramos con la situación de que había un sillón fuera de nuestra habitación donde otros huéspedes fumaban, lo cual resultó incómodo porque entraba humo en nuestra habitación y teníamos que mantener la puerta cerrada.

La estancia en este hotel fue una experiencia encantadora. Lo mejor de todo fue la ubicación privilegiada, justo al lado del río y rodeado de viñedos. Sin duda, es un lugar ideal para aquellos que buscan desconectar y disfrutar de la tranquilidad de la naturaleza. Además, me sorprendió gratamente la amabilidad y simpatía del personal, siempre dispuesto a hacer que mi estancia fuera lo más agradable posible. Otro aspecto destacable fue la degustación de vinos que ofrecían por las tardes, ¡una oportunidad perfecta para conocer y disfrutar de los vinos locales!

Aunque tuve una estancia maravillosa, hay algunos aspectos que podrían mejorar. El desayuno podría ser más completo, eché de menos opciones como croissants o queso.

Las habitaciones son prácticas, con un buen diseño y de calidad excelente con un baño en suite, una terraza.

La habitación es práctica y tiene un diseño bello, con una cama cómoda, y el lugar está en una ubicación encantadora y estupenda.

Nos la pasamos súper bien en el château. El rollo estaba muy guay, cerca del río y entre los viñedos. Además, el château estaba flipante, las habitaciones eran mega amplias y las instalaciones estaban en punto. ¡Y no te imaginas el desayuno, era una pasada! Los dueños eran mu majos y nos dejaron catar vinos gratis por las tardes. ¡Repetiremos, sin duda!

Lo único que podríamos pedir para que la fiesta fuera aún más genial es que organizaran alguna actividad nocturna. ¡Imagínate, una fiesta en el castillo sería lo máximo!

Las habitaciones eran fabulosas, ¡bien hecho!

El hotel era el lugar adecuado para, además gozaba de una zona preciosa, al lado del mercado, del río. Nos han gustado mogollón sus habitaciones con una cómoda cama. El desayuno era delicioso y maravilloso, y tienen un personal majísimo.

un hotel lindo, una ubicación brillante, una habitación relajante. un desayuno generoso; un personal muy educado y bueno.

Las mejores aspectos de mi estancia en este hotel fueron: la hermosa ubicación en medio de los viñedos y junto al río; la amabilidad y simpatía del personal; la limpieza y comodidad de las habitaciones; y el delicioso desayuno casero. Además, me encantó la tranquilidad y el ambiente bucólico que se respiraba en este lugar.

Imposible encontrar algo negativo.

Increíble lugar con vino propio y hermoso entorno junto al río! El desayuno casero es genial y te da la oportunidad de conocer a otros viajeros. Una ubicación perfecta para explorar la zona de Burdeos. 👌

La vista al río Dordogne desde la terraza fue simplemente impresionante. Me sentí como si estuviera en una pintura antigua, capturada en el tiempo.

El humo del cigarrillo proveniente de otros huéspedes que fumaban fuera de nuestra habitación fue un inconveniente, ya que entraba en nuestra habitación.

En resumen, a pesar de algunos inconvenientes, mi experiencia en este chateau fue muy positiva. La hermosa ubicación, la comodidad de la habitación y la oportunidad de probar vinos locales fueron definitivamente puntos a favor.

Hubo algunas cosas negativas. El desayuno no era tan bueno como esperaba, faltaban croissants y queso.

La estancia en Chateau De La Vieille Chapelle fue una experiencia muy agradable. El dueño fue muy atento y amable, siempre dispuesto a complacernos. El desayuno era muy bueno, con una buena selección de frutas, pan y mermeladas. Además, ofrecían una cata de vinos por la tarde, lo cual fue muy interesante. El entorno del hotel era simplemente impresionante, rodeado de viñedos y cerca del río Dordoña. Sin duda, fue una estancia bucólica y hermosa.

Nada. 😊

La ubicación es perfecta para visitar Burdeos, Saint Emilion, Libourne y la zona vinícola. El hotel es espectacular, muy bien decorado y tranquilo, rodeado de viñedos cultivados por los encantadores y discretos dueños. Las habitaciones son amplias y cómodas, el entorno es hermoso con su jardín y junto al río. El desayuno incluye productos caseros y te permite conocer a otros viajeros en una mesa grande.

No dudaría en recomendar este hotel.

En el Chateau De La Vieille Chapelle en Lugon et l'Ile du Carney disfrutamos de: el edificio, el entorno, el desayuno, y conocer a otros viajeros. La ubicación es perfecta para visitar Burdeos, Saint Emilion, Libourne y la zona vinícola. El hotel es espectacular, bien decorado, tranquilo y rodeado de viñedos cultivados por los dueños.

Nos encantó el edificio, el entorno donde estaba situado, con su jardín y junto al río. Era muy agradable, perfecto para nuestra estancia el fin de semana. El desayuno, aunque no era de gran variedad, incluía productos caseros, todo estaba genial, y nos dio la oportunidad de conocer a otros viajeros al compartir una mesa grande. ¡Muy interesante!

Todo fue perfecto 👌🏼